13 noviembre 2008

Dame argo, primo

Si en este mundo hay algo que no soporto es que me tomen por tonta.
Cierto es que a veces yo me hago la tonta conscientemente, siendo entonces aceptable que me traten como tal. Pero que alguien intente aprovecharse de la bondad, generosidad o simplemente la ingenuidad ajena... me cabrea, por decirlo educadamente.

Puedo llegar a comprender (que no es lo mismo que compartir) que alguien se vea en la urgente necesidad de mendigar. Que lo considere la solución y único escape a sus problemas económicos, a pesar de que yo no esté de acuerdo.
Pero cuando paso frente a un mendigo de cuarenta años fornido, en perfecta forma física, vestido con harapos y con la cara sucia (intencionadamente) me dan ganas de soltarle un sopapo. No les insulto porque si me guío por sus cartelitos informativos, la gran mayoría no saven hegcrivir ni leer, ni la soziedá leh permite integrarce pork son unoh incurtos, por lo que no creo que supiesen apreciar mis refinados modales blasfemos.
Y ya no os cuento cuando llevan un perro, o un niño, o ambas dos cosas. Qué culpa tendrá el bebé para estar ahí al sol durante horas... Y el perrito, coñe, con esa carita de pena que me mira y me parte el alma. Al chucho le daba yo un bocata y a su "dueño" otro sopapo. Doble.

Últimamente estamos llegando ya a unos puntos de mendiguismo extremos y super-fashion: mujeres con bata y despeinadas, cuyo cartel reza algo así como "mi marido me pega y si no llevo pelas a casa me matará". O ese otro que tiene pinta de guiri adolescente de erasmus, despistado y con cara de sueño, que te dice en voz bajita y lastimera: "yo ser irlandés, robarme todo anoche y no tener dinero para volver a casa".
Francamente, a esta gente más que un sopapo yo les metía una multa... Porque juegan con temas delicados que no deberían servir para lucrarse, y porque encima soy tan lerda que a veces incluso les creo durante dos milésimas de segundo y consiguen hacerme sentir mal.
Y entonces yo, que curro como la que más para poder llegar a fin de mes sin números rojos en mi cuenta (casi sin éxito) pidiendo además mil ayudas al Estado para pagar mi alquiler... les miro a esos ojos suyos -expertos en fingir- y voy y les suelto un euro.
Joder.

4 comentarios:

  1. Seguro que ya te he contado la historia, porque la he repetido tantas veces... pero creo que merece la pena repetirla una vez más (seguro que alguno pasa y no la ha escuchado antes)

    Estaba mi hermana paseando por las calles del centro de Zaragoza, cuando pasó por delante de un mendigo. Uno de esos que llevan toda la vida ahi. Le soltó una moneda (todavia era en pesetas), y se marchó. Más tarde se dio cuenta que lo que le había dado no era una moneda, sino una pequeña medalla de latón, que económicamente no valía nada, pero era de mi abuela.

    Al dia siguiente fue al mismo sitio. El mendigo no estaba, asi que le preguntó al pobre de al lado, el cual le dió la dirección donde vivía. La calle era la más cara de la ciudad.

    Extrañada, subió al piso, una casa con dos puertas. Llamó, y abrieron la puerta de servicio. Mi hermana le dijo que seguro que se había equivocado, pero le habian dado esa dirección y le contó lo que había pasado. La sirvienta, entró, preguntó al señor por la medalla, este le contestó "está en la chaqueta de pedir". La sirvienta fue a la chaqueta, cogió la medalla, y se la devolvió.

    :*********

    ResponderEliminar
  2. Tonta mas que tonta... un euro... un sopapo, que a las mujeres no se las puede pegar, aprovechate!! xD

    Yo ultimamente no suelto un euro a nadie, a lo mucho a la ong mensual... pero aun asi me lo estoy pensando. La verdad es que un gran porcentaje de lso que estan pidiendo no son mas que mafias y los que si necesitan pedir se pasan buscando entre basuras la comida.

    En estos tiempos toca ser tiranos, mejor dicho, justos.

    PD: Acuerdate de mi cumple, quiero un regalo enorme.

    ResponderEliminar
  3. Cuanta razón tienes. A mi me pone de muy mal humor verlos mendigar, intentando hacerme pensar que es por mi culpa que estan asi. Yo en vez de un sopapo los metía a todos en la carcel. ¿No dices que no tienes techo ni "pa comé"? Pues ala, en la carcel estarás calentito y tendras comida y cama.

    Luego, aparte, se te ha olvidado otra modalidad. Está la modalidad que (aquí, en Madrid hay varios) que se sube al metro, se arremanga la pernera del pantaló, se baja unas gasas que lleva y se deja al descubierto una herida supurante. Acto seguido empieza la cantinela:

    - Buenas tardes NO QUIERO MOLESTARLES (ja-ja-ja. Me troncho) verán tengo el SIDA y como el estado NO ME AYUDA (Vamos a ver, si aquí, menos la gente normal, y algún que otro afortunado, todo el mundo obtiene ayudas) pues me veo obligado a mendigar.

    Acto seguido se pone a pasear por el vagon (muchas veces atestado) con la herida al aire. ¿Esto que es, un secuestro? ¿O me das una moneda o te restriego la herida por la cara? ¿Como funciona esto? A mi me pone de muuuuuuuy mal humor.

    El otro día estuve echando cuentas, y he llegado a la conclusión de que no les debe ir tan mal. Suponiendo que consiguiesen que alguien les eche una mondeda de 10 CENTIMOS cada minuto (cosa no muy dificil, ya que hay mucha gente que les echa un euro o medio, asique ya tienen echos 5 minutos o 10) pues suponiendo que les echen esa cantidad, "TRABAJANDO" 6 horas de nada, se sacarian un "SUELDO" de unos 750€ de nada. En negro por supuesto.

    No les debe ir tan mal, ya que algunos hasta les ves que se han teñido el pelo... (Esque "pa comé" no tienen, pero hay que ir mono a pedir...)

    Resumiendo, que me voy a hacer mendigo yo también, les va genial...

    Y las ONG, mejor no hablo de ellas, porque ya os estoy dando mucho la plasta y si no, me enrollo otros 25 centimetros de comentario. XD

    Un besote.

    ResponderEliminar
  4. LLevo semanas pensando eso, meditando qué hacer, incluso jugando a adivinar qué de toda esa gente será cierto que necesita pasta.

    Es tan injusto, porque los que realmente necesitan el dinero por no encontrar curro o lo que sea, se dan de bruces con una gente que no necesita mendigar o que puede conseguir pasta currando que les quita la poca calderilla que pudieran darle, porque esa es otra, hemos llegao al punto de acostumbrarnos de tal manera a verlos por la calle que ya, ni lástima.
    Y también es triste pensar con todo lo que tenemos nostros, que seamos incapaces de soltar un euro.
    Y el motivo es el que tu dices, aunque suene a excusa, el motivo es que nos engañan de tal manera que al final, pagan justos por pecadores.

    Muy triste.

    ResponderEliminar