Hay personas que te marean. Que te atraen como un imán pero que cuanto más cerca estás te sientes como en una goma elástica que se estira y que está a punto de lanzarte por los aires. Que tan pronto te hacen reír a carcajadas como que de golpe te hacen sentirte fatal.
Hay personas por las que sientes que lo darías todo si te lo permitieran, si te convencieran de que merece la pena. Te mueres por creer, igual que Fox Mulder. Suelen ser las mismas personas que más daño te hacen, porque al final nunca te convencen.
A esas personas hay que alejarlas de una vez por todas de tu vida. Y lo escribo aquí para ver si me acabo aplicando el cuento.
Cuesta, cuesta mucho. Pero en cuanto te liberas del lastre...vuelas más alto. Suerte
ResponderEliminarAmén!!!
ResponderEliminarSuelen ser gente a las que les confías cosas, para que luego al final las retuerzan y las usen en tu contra.
No se merecen ni el aire que respiran.
En realidad "esas" personas en si mismas no son las culpables, los culpables somos nosotros que forjamos quimeras donde nunca hubo nada. Y desde luego, es mejor irse con la música a otra parte.
ResponderEliminarBesos
(...)
ResponderEliminarHay personas a las que hay que mantener cerca y otra a la que todo lo lejos es poco. Así de "sencillo".
ResponderEliminarUn beso!
Ay, amiga. Yo hace tiempo que decidí que no merece la pena sufrir por un par de buenos momentos. Será que soy mayor, pero si no aporta positividad a mi vida, puerta.
ResponderEliminarHay personas que son como las drogas: te enganchas, aunque sepas que sólo te traerán problemas. Y hay que desngancharse como si de una droga se tratara.
ResponderEliminarNo le sobra una sola coma, ni le falta un solo punto. Felicidades por tu blog, Rizos. Lo sigo atentamente. Anónimo.
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