Hoy acaba otra etapa de mi vida, de esas que te marcan y que se quedan muy adentro para siempre.
Mientras esta mañana empaquetaba todos los juegos y material de animación en enormes cajas de cartón repletas de dibujos con edding y fotos nuestras, me puse a recordar mi primer día en el hotel. Estaba asustada, nerviosa, con las rodillas temblonas y la sonrisa histérica. Paseaba por las instalaciones del hotel detrás del subdirector tratando de concentrarme en sus explicaciones acerca del funcionamiento de todo, pero una parte de mi mente se distraía sin remedio en preguntarme si serviría para la animación, yo que me veo tan pequeñita ante el mundo.
Aquellos primeros días estuvieron llenos de anécdotas y meteduras de pata, y no paraba de escuchar a los camareros y recepcionistas hablándome del antiguo equipo de animación, la pareja de jóvenes que hacían nuestro trabajo el año pasado.
Hoy, colgando los disfraces en el vestuario, me pregunté si el año que viene los camareros les hablarán de mí a los nuevos animadores, si lo harán con cariño y con la misma sonrisa con la que yo les recordaré a partir de ahora.
Siento una mezcla de alegría, alivio, melancolía, ilusión, miedo y tristeza... todo hecho un cóctail nervioso en mi estómago y en mi pecho. Sé que me va a costar mucho alejarme de donde (por fin) sé que está mi sitio... pero también sé que es provisional. Que algún día volveré a la animación, aunque no sea de animadora. Y que quizá no sea mañana, ni el mes que viene, ni siquiera el próximo año... pero que volveré.
Porque me gusta, porque me llena, porque creo que soy buena en mi trabajo y porque nunca nada sustituirá esa sensación que me inunda por dentro cuando termino de bailar o presentar y escucho los aplausos.
Ahora a abrir otras puertas... deseadme suerte, por favor. Una vez más.
Por varias razones sabes lo que pienso sobre ti...
ResponderEliminarPrimero... Mucha suerte.
Segundo, no creo que necesites esa suerte, puesto que siempre tuve la sensación de que eres una de esas personas que consigue lo que quiere y que anima a todo el que está cerca de ti.
Tercero, no creo que "te vayas" de la animación, hagas lo que hagas siempre vas a procurar sacar una sonrisa a quien pase a tu lado.
Cuarto, cuidate.
Quinto, sonríe.
Sexto, sé feliz y disfruta.
solo soy un bicho raro que aun busca su sitio... aunque podria ser tu padre...
ResponderEliminarpero de una cosa estoy seguro, allá donde vayas... allá donde aterrices, encontrarás buena gente que te apoyará y te ayudará...
a mi sigues pillándome lejos, pero sabes que en lo que pueda...
mucha suerte, hermosa
:********
Y la vida siempre esta llena de sorpresas, tantas que a lo mejor lo que cuentas puede quedar en el pasado y encontrar algo aun mejor, y ante todo encontrarte a ti misma ;) Siempre buscamos eso, nunca nos conocemos lo suficiente :)
ResponderEliminarSuerte Beita!
¿Qué tienen los aplausos y los telones que llenan tanto? Hacía mucho que no me paseaba por tu blog, y como habrás observado por el mío tampoco.
ResponderEliminarTe quiero Rizos