A mí no me confuden. Por mucho que me digan que nadie es inocente al 100%, que todos tenemos algo de malicia, que los ángeles no existen y que deje ya de hacerme la buena cuando no lo soy.
Porque creo que no es exactamente lo mismo saber que vas a tener un problema con tu perro este verano que abandonarlo en un arcén cualquiera. Ni tampoco pisar una cucaracha presa del asco/pánico que mutilar un gato lentamente.
No podemos meter en el mismo saco al que piensa que tu mejor relato es un asco, que al que te lo dice esperando ver tu reacción desilusionada... o juzgar por igual al que te hace llorar porque te quiere que al que no le importa si ríes o lloras.
Hay una delgada línea (a veces casi imperceptible) que rodea tus acciones y las consecuencias de ellas: en el momento en que haces daño intencionadamente y sin sentimiento de culpa, tus pies traspasan la frontera y ya nunca volverás a ser el mismo.
Y es como fumar, creo. Cuando has dado el primer paso, has herido a alguien y comprobado que aunque al principio no te guste el sabor... la vida sigue, ya no hay vuelta atrás. Porque vuelves a fumar, un día, y entonces te gusta un poquito más. Hasta que te enganchas y el humo de tu conciencia deja de molestarte.
Yo no soy ninguna santa: he sentido celos, rabia, desconfianza; he sido perezosa y poco constante; he mentido y he hecho cosas de las que jamás estaré orgullosa.
Pero nunca, nunca, nunca fui capaz de hacer daño a nadie intencionadamente. Qué demonios, si tampoco le he dado jamás una calada a un cigarro...
¿Qué te han hecho? ¡Que me los cargo! Grrrrrrrrrrrrrrrr...
ResponderEliminarTienes que olvidar ya lo de Jimmy Jump,no es bueno acumular tanta rabia ;P
ResponderEliminarLa maldad porque sí no tiene justificación. Pero sí creo que a veces es la única forma de defenderse de un ataque inminente. Me estoy explicando fatal... en fin, quizás a veces sí la justifique, no sé.
ResponderEliminarSí tengo claro algo en lo que discrepo contigo: hay vuelta atrás. Se puede causar daño intencionadamente y sin arrepentimiento pero no querer hacerlo de nuevo.
Joder, si empiezas diciendo que los ángeles no existen...
ResponderEliminarTodos hemos tenido nuestros dias malos, pero hay cosas que sé que jamás podré hacer. Y hacer daño intencionadamente es una de ellas.
Si cuando lo hago sin intención no puedo soportar la culpa... imaginate si lo hago a propósito
Nada, que no cuela
Besoooooos
Sil: Nada, morena :D Tu tranqui que son solo pensamientos en voz alta...
ResponderEliminarDoctora: AJAJAJAJ ¡ahi le has dao! Sigo guardándole rencor, grrrrrrrrrrrrr
Gordi: lo que quiero decir es que cuando has hecho daño sin cargos de conciencia, ya no volverás a ser la misma persona. Todos tenemos tentaciones y a veces es fácil herir a los demás, pero no es igual alguien que se contiene al que no lo hace. No soy yo quien deba decir si son mejores o peores, pero sí diferentes moralmente hablando.
Eingel: jajaj bueno, no existen menos tú :P Y sí, ya sé que tú eres un peazo pan. A ti te pongo del lado bueno de la línea :P
Besotes a los cuatro :)
yo? te recuerdo que ya no conservo las alas... y lo de pedazo de pan... lo bueno del pan es lo que acompaña
ResponderEliminarMuaks
Quien mas y quien menos tenemos nuestras cosas,supongo que esa delgada linea se mueve a un lado u otro segun tus intenciones. Un abrazo.
ResponderEliminarNadie es bueno, la malicia es inherente al ser humano en mayor o menor medida.
ResponderEliminarLos hay malísimos, menos malos, y malos tirando a buenos... pero buenos de verdad, creo que no. Y siento pensar así, pero ya sabes que perdí la fe hace tiempo.
Al final vas haciendo callo y ves venir a la gente, aunque a veces es difícil.
Un beso guapa.
A los que somos un poco timidos nos pasa de vez en cuando que nos dicen "esos calladitos son los peores" tiene cojones despues de que uno es calladito (dicen ellos) además te ponen la etiqueta de "los peores", en fin yo siempre digo que en esos casos no hay mejor defensa que cruzar los brazos. Salu2
ResponderEliminarLeí en algún sitio, y estoy de acuerdo, que en el mundo hay una ínfima minoría de gente "buena" en el sentido de hacer cosas por los demás, comprometerse más allá de lo usual (No sé, la Madre Teresa de Calcuta, o Vicente Ferrer, por decir algo), otra ínfima mínoría de gente "mala", los sádicos que disfrutan haciendo daño a otros (Pol Pot o en otro sentido Josef Fritzl por poner dos ejemplos)
ResponderEliminarEl resto, la inmensa mayoría, no somos ni buenos ni malos. Todos tenemos cosas buenas, dónde, cuando y con quien queremos (La pareja, la familia, los amigos, qué se yo, un gatito abandonado que encontramos en un contáiner), pero todos somos, bajo ciertas circunstancias, capaces de hacer daño conscientemente y hasta de disfrutarlo. ¿Qué no le harías al trepa cabrón que se ha adueñado de tu esfuerzo, quedándose con un ascenso que te pertenecía a base de engaños y malas artes? ¿Que golpes le ahorrarías a un joputa que por ejemplo ha apaleado a tu madre? En ambos casos, teniendo ocasión, que esa es otra, no siempre la hay, (casi) todos nos vengaríamos de manera cruel y (casi) todos disfrutaríamos de su sufrimiento.
Ah, pero nos gusta creernos buenos, solidarios, justos y ecuánimes...
Miguelín: yo no muevo mí linea. Sé dónde está y qué pasaría si la cruzo, y por eso no lo hago. UN besote.
ResponderEliminarOscar: como ya dije no existen santos, pero creo que tú eres una buena persona. No pierdas la fe, que algún dia encontrarás a alguien que te hará cambiar de idea.
Sisma: pues a mí los calladitos me parecen gente entrañable; nunca me atrevería a decir que son los peores y menos sin conocerles... Yo creo que hay extrovertidos malos, calladitos buenos y de todo.
Janton: yo no me creo buena. Ni mala. Y tampoco digo que haya gente angelical que da su vida por los demás, que creo que Ghandis solo hubo y habrá uno.
Pero yo he tenido oportunidades de hacer daño, y nunca lo hice. Creo que la justicia no está en mi mano, y aunque esté harta de recibir palos, soy de la opinión de que cada cual tendrá lo que se merece tarde o temprano.
De la misma forma creo que hay gente que no es cruel, ni retorcida, y que aunque se defienda cuando le atacan (porque es algo natural sacar las uñas si te hieren) no van haciéndole la puñeta a los demás.
Que ésto sería un caos si no existiese gente amable y humilde, desinteresada y agradable para compensar la balanza debido a tanto hijoputa suelto.
Aunque en un principio mi idea no era hacer daño, reconozco que lo he hecho, y una vez hecho, aunque me pese un poco, no me arrepiento y si no lo hago es porque seguramente se lo merecieran, y aunque me pese la culpa, en muchas ocasiones, intento converme de que no soy mala.
ResponderEliminarYo si que no soy un angel... tú si... :)
Saludines,
YoMisma
Hay mucha gente mala por ahí suelta. Jude Law, por ejemplor.
ResponderEliminarCuando descubres el lado oscuro ya no hay vuelta atrás ;)
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