Ayer me regalaron cinco rosas, bombones con pétalos de rosa, un punto de libro de rosas y sorbete de fresa con esencia de rosa. No lo digo por fardar, (de hecho creo que hubiese preferido menos rosas y más libros) sino para comenzar dejando bien claro que lo que voy a decir ahora no es fruto de la envidia o la rabia. Sólo de la pena.
En San Jordi todas las chicas de Barcelona tienen que pasearse por la calle con una rosa, al menos. En teoría tu chico, tu padre, tu hermano o cualquier hombre que te aprecie debere regalarte la flor si quiere respetar la tradición, así que cuando vas caminando por Rambla Cataluña con tu rosa en mano es como si llevases un cartel que diga "pues sí, a mí también me quieren". Absolutamente todas las mujeres, ya sean niñas, jovencitas de buen ver, ancianitas o marujonas en bata lucen sus flores tanto como pueden, aunque sea muy incómodo pasarte el día con la rosaca y la espiga y el pedazo de papel que le ponen de una mano a otra.
Mientras caminaba anoche por Rambla Cataluña de vuelta a casa, me puse a observar los restos de la inundación florida y a las pocas parejas que aún quedaban paseando de la mano, y no pude evitar acordarme de aquellos tiempos en los que yo paseaba sola por el mundo. Por aquel entonces lo más probable es que de haber vivido en Barcelona no hubiese recibido ninguna rosa por San Jordi...
Mi sonrisa se congeló, y mi mente comenzó a vagar otra vez sin poder remediarlo por aquella amargura de saber que era invisible; aquella certeza de soledad que empapaba de lágrimas mis tardes adolescentes.
La camarera del bar donde como a diario estaba limpiando las mesas para cerrar su local. Pasé junto a ella y observé su frente sudorosa, sus manos cansadas y ese gris en la mirada que denota hastío y pesadumbre. Me acerqué a ella, la saludé con la mirada y le tendí una de mis rosas, consciente de que lo más probable es que fuese la primera que recibía ese día.
Entonces ella dejó el trapo sobre una mesa, puso los brazos en jarras y exclamó, tratando de parecer alegre:
-¡Gracias, Bea! Es la segunda que me regalan hoy, me ha hecho mucha ilusión...
Vaya, pensé yo, enfurruñada. Se me han adelantado...
Ella pareció captar mis pensamientos y me dijo, ufana:
-La primera me la compré yo misma, esta mañana.
Me despedí de ella con un gesto cariñoso, mirando mis rosas de otra manera.
Aún tengo mucho que aprender en esta vida... así que abriré bien los ojos, agudizaré el oído y dejaré que mi pasado se quede donde está, de una vez por todas.
Cada vez estoy más convencida de que hay poca gente como tú.
ResponderEliminarEres demasiado especial....
Qué linda!!
Lo malo no es no recibir una rosa o un libro. Lo malo es acostumbrarse a recibir una y de repente un año, no recibir nada...
ResponderEliminarTu pasado te hace mas fuerte,
ResponderEliminarno tienes que olvidarlo niña,
solo vivir intensa el presente
trabajar y soñar con el mañana.
Tú eres tú, no vivas en tu pasado
pero no lo pierdas, no, yo lo quiero.
Es tuyo que no te lo quite nadie,
gracias a ese dolor y a esa vida
ahora eres mas fuerte y sensible.
Besos melancólicos.
Esto mismo lo podría haber escrito yo :)
ResponderEliminarBea, tienes un corazón que se te sale del pecho (No sé si debería haber escrito esto, que a lo mejor hay quien lee "pecho" y se vuelve loco, como la que se lió con aquel pliegue de ropa en forma pezonil de la famosa foto...)
ResponderEliminarEn todo caso, sinceramente, quiero decirte que me pareces una persona muy hermosa por dentro y por fuera.
Efectivamente, Sant Jordi es duro para los solitarios que no tienen ni libro ni rosa si no se las compran ellos mismos. Pero no más que las navidades repletas de anuncios de fiestas familiares para quien no tiene familia, o el día del padre para servidor de Ud. que se pasó toda la vida sin padre conocido (Aunque fue peor el conocerle, pero de eso ya hablaremos otro día)
La verdad, aunque tuvieras ya cinco, no me hubiera importado regalarte la sexta rosa del día. Que te mereces muchas más, estoy seguro de eso.
Desde luego, en días señalados come este descubrimos muchas cosas sobre el mundo... A veces buenas, y otras no tanto.
ResponderEliminarBesos.
Este tipo de fiestas afectan más a quién no tiene con quien compartirla que a los demás.
ResponderEliminarA mi, desde la distancia y el respeto, siempre me a parecido una tradición un tanto machista esa de regalar flores a ellas y libros a ellos. Cuando en realidad, actualmente, son las mujeres quienes más leen. Deberíais actualizarla y regalar un libro a las mujeres y en ejemplar del Marca a los honbres
no tener con quien compartir una flor, o un paseo, es muy duro. Observas las parejas, las odias, te preguntas por qué... Te han dicho mil veces que tarde o temprano llega, pero llegas a dudarlo...
ResponderEliminarla posibilidad de que tengan razón es lo que te permite levantarte por las mañanas. Porque si no... ¿para qué?
(tu has comprobado que al final llega... veamos cuando me toca)
Besoooooos
Precioso gesto que tuviste, Rizosa!
ResponderEliminarNo dejes de llevar a cabo esos impulsos que te hacen diferente y especial.
Un saludo!
Una rizosa que aparece algo chisposa, a causa del tinto de verano con el que acabo de regar mi recién estrenado cumpleaños, os da las gracias a todos por vuestros agradables comentarios (Txis, Roboto, Eu, Beatrix, Janton, TheInnerGirl,Fran, Eingel, Lasosita) y os desea un buen fin de semana repleto de siestas interminables y biofrutas varios ^_^
ResponderEliminarPero shikilla... ¿que horas son esas de llegar a casa? :P
ResponderEliminarComo hoy ya es 25 (sin rima, plis)
te deseo...¡¡UN FELIZ CUMPLEAÑOSSSS!!
I love you
Niña, estuviste sembrá.
ResponderEliminarTe has llevado contigo un pedacito del sol de Málaga a Barcelona.
Me encanta tu forma de ver la vida, esa botella medio llena.
Y concluyes bien: ¡Siempre p´alante!
Por cierto, felicidades atrasadas, ya veo que diversión no ha faltado.
Es hoy, ¿verdad? ¿No me falla la Jantagenda?
ResponderEliminarFELICIDADES!!!!
Espero que recibas un abrazo por cada año, y un beso por cada mes de cada año, y un... ejem... Lo que sea que desees...
Un fuerte fuerte abrazo!
Oops!!! Aun llego a tiempo! Felicidades!!!! :)
ResponderEliminarEn valencia el día de los enamorados es el 9 de octubre y a las chicas nos regalan un pañuelo y unos mazapanes con forma de fruta.
ResponderEliminarMientras mi padre vivía no me faltó ni un sólo año, tuviera pareja o no. Cuando mi padre falleció dejé de recibir ese regalo... igual el año que viene me encuentro con una beabiofrutas con un enorme corazón por aquí y me regala su pañuelo...
5 Rosas y una flor rara (con abejita incluída :P )
ResponderEliminarCreo que no hace falta que te felicite, no?
Un besico
Jjajaa muchas gracias a todos por las felicitaciones :)
ResponderEliminarCamaleona, estaría encantada de regalarte el pañuelo más bonito de Valencia :P
Fiebre: gracias! Es mi lema: el vaso siempre medio lleno! ^_^
Janton: Lo del "un ejem" es lo que mejor me viene, fíjate XD Otro abrazaco gigante para ti.
Soundtrack: gracias, resalao.